Invocación a Patañjāli

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Patañjāli vivió hace unos 1.700 años en la India. Se le atribuyen los textos de tres importantes comentarios: el Mahabhasya, sobre la gramática para hablar correctamente, el Ayurveda, medicina para la salud, y los Yoga Sutras, que condensan la filosofía del yoga en sólo 196 sutras (aforismos) y que muestran cómo a través de la práctica del yoga podemos dirigir nuestra mente y nuestras emociones, superar los obstáculos y alcanzar la unión con lo divino.

 

Los Yoga Sūtras se mantienen vigente para el desarrollo integral del ser humano, sin distinción de sexo, raza, creencias, lugar de nacimiento o condición social.

 

La invocación a Patañjāli es un canto que se usa a menudo para abrir una clase de Yoga Iyengar. Al cantar la invocación, el practicante no solo reconoce a Patañjāli, sino también el linaje de maestros que han permitido que la practica del yoga se transmita. Sus palabras evocan el poder purificador de estas enseñanzas antiguas. La tradición Iyengar en particular se basa en las enseñanzas de Patañjāli.

Invocación A Patañjali

योगे चित्तस्य पदेन वाचां ।

मलं शरीरस्य च वैद्यकेन ॥

योऽपाकरोत्तमं प्रवरं मुनीनां ।

पतञ्जलिं प्राञ्जलिरानतोऽस्मि ॥

YOGENA CITTASYA, PADENA VĀCĀM

MALAM ŚARĪRASYA CA VAIDYAKENA

YOPĀKAROTTAM PRAVARAM MUNĪNĀM

PATAÑJALIM PRĀÑJALIR ĀNATO’SMI

ABAHU PURUSHAKARAM

SHANKHA CAKRASI DHARINAM

SAHASRA SHIRSAM SVETAM

PRANAMAMI PATANJALIM



(FONÉTICA EN ESPAÑOL)

YOGUENA CHITASIA PADÉNA VÁCHAM

MALÁM SHARIRASIA CHAVAI-DIA-KÉ NÁ

YOPÁH KAROTÁM PRAVARÁM MU-NI-NÁM

PATAN-YÁLIM PRAN-YÁLIR ÁN-A-TÓSMI

AABÁJU PURUSHÁA-KARÁM

SHANKA CHAKRÁSI DHAARI-NAM

SAJÁSHRA SHIRASAHM SVETAHM

PRÁNA-MÁMI PATAN-YÁLIM

HARI-I OM

 

INVOCACIÓN A PATANJALI

AL MAS NOBLE DE LOS SABIOS,

PATAÑJALI, QUIÉN DIÓ EL YOGA PARA LA SERENIDAD DE LA MENTE,

LA GRAMÁTICA PARA LA PUREZA DE LA LENGUA Y LA MEDICINA PARA LA PERFECCIÓN DEL CUERPO,

ME INCLINO ANTE PATAÑJALI.

CUYA PARTE SUPERIOR TIENE FORMA HUMANA,

EN CUYOS BRAZOS SOSTIENES UNA CONCHA,

UN DISCO Y UNA ESPADA, QUIEN ESTÁ CORONADO POR UNA COBRA DE MIL CABEZAS.

¡OH! ENCARNACIÓN DE ADISESA, MI HUMILDE SALUDO A TI.

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